Todo lo necesario para una estancia de valor encerrado en 65 metros cuadrados. La habitación Deluxe aprovecha de la luz, el estilo y la teconología, separando con sabiduría los espacios. En el primer piso hay una cocina atentamente adecuada con horno de microondas, dos hornallas, una nevera y un cómodo hervidor. Un rincón de la casa donde disfrutar de un fantástico desayuno y mientras tanto descansar en un cómodo sofá cama, antes de una intensa gira por la ciudad. El altillo presenta una cómoda cama “king size” y también el cuarto de baño, para regalarte una experiencia de impecable hospidalidad en cada su aspecto. El detalle que le da aún más valor al apartamento es el gusto y el talento artístico del escultor Lello Esposito, quien eligió nuestra estructura como una exposición continua. En respeto de su historicidad, el edificio falta de elevador y no permite el alojamiento de niños con menos de 12 años.